La baraja inmobiliaria: La crisis no es ningún juego

Banqueros, promotores, constructores, empresarios, inversores y políticos han especulado durante años con casi cualquier producto del mundo de la construcción, creando una burbuja inmobiliaria de tamaño monstruoso en el precio de dichos inmuebles.

Como resultado de ello, tenemos en estos momentos una sociedad endeudada, una economía familiar destrozada y un sistema bancario en bancarrota: en definitiva, un país completamente arruinado y con pocas espectativas de crecimiento económico a corto y medio plazo.

Esta crisis, recesión o incluso depresión económica que probablemente atravesaremos no es casualidad, y tampoco es justo echar toda la culpa a EEUU y a sus hipotecas ninja, créditos basura, 'hedge funds', o subprimes... aquí en España somos igual de culpables.

¿Quién es quién en el juego del ladrillazo? ¿Quién ha querido perseguir el sueño dorado español del pelotazo urbanístico, máximo dinero por el mínimo esfuerzo?

Dichos actores y creadores de la burbuja inmobiliaria no sólo han negado su existencia, sino que siguieron engañando a todos los ciudadanos; y no sólo al principio, sino que una vez se produjo el estallido en Estados Unidos, siguieron rechazando como posible todo lo que está sucediendo en estos momentos.

Ahora la burbuja ha estallado; todo lo invertido se disuelve mientras el valor de los pisos sigue devaluándose mucho más rápido de lo que cualquiera hubiera podido augurar. Por si fuera poco, los bancos piden ayuda al gobierno, ayuda que saldrá directamente de nuestros impuestos, rehipotecando nuestro futuro. Nos sentimos robados y estafados.

Las declaraciones que aquí aparecen, en estas cartas de póquer español, fueron hechas de modo literal por cada uno de los protagonistas en discursos públicos o comunicados, y aunque ahora su discurso ha cambiado radicalmente, es hora de pedir responsabilidades.